Cómo ser ambivalente puede ayudarlo a tomar mejores decisiones

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Foto: Constantin Stanciu (Shutterstock)

Algunas decisiones requieren mucha reflexión: sopesar los pros y los contras y tratar de alcanzar el mejor resultado posible. Pero algunas personas son indecisas sobre casi todo, grande o pequeño. Ya sea que esté tratando con una persona ambivalente o usted mismo sea una persona ambivalente, sabe que puede ser molesto.

Pero según un nuevo estudio publicado en el Revista británica de psicología social, la ambivalencia podría no ser la rasgo negativo que creemos que es. En un artículo para Psychology Today, Dra. Susan Krauss Whitbourne, profesor emérita de ciencias psicológicas y cerebrales en la Universidad de Massachusetts Amherst, arroja algo de luz adicional sobre los beneficios potenciales de la ambivalencia, así como una desventaja. Esto es lo que debes saber.

Cómo usar tu ambivalencia a tu favor

Básicamente, todo se reduce al hecho de que las personas ambivalentes se toman el tiempo para considerar los distintos lados de un problema, lo que puede hacer que tomen decisiones más informadas. Whitbourne usa el ejemplo de ir a un restaurante con cierto miembro de la familia que siempre toma para siempre ordenar, y pone de los nervios a todos (incluidos los servidores). Aquí está su toma:

Equilibrar factores como las opciones saludables, el precio y el método de preparación puede, en última instancia, conducir a una mejor selección que la prisa por conseguir lo que sea primero en la lista de posibles platos principales. ¿Cuántas veces se ha sentido decepcionado cuando llega su propio plato principal y se da cuenta de que tomó la decisión equivocada al apresurarse demasiado?

La desventaja de la ambivalencia

Aparte de que las cosas toman mucho tiempo, hay otro aspecto negativo de la ambivalencia, dice Whitbourne:

Una decisión rápida puede ser el equivalente mental de quitar el vendaje de una herida sin dudarlo. Puede ser doloroso, pero se acaba de una vez. Para los crónicamente ambivalentes, la incapacidad de resolver el conflicto puede generar tensión, preocupación y un estado mental negativo en general.

Así que tenlo en cuenta la próxima vez que te encuentres en una situación que involucre a alguien que sea particularmente indeciso (incluido tú mismo).

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